Hasán Nasrala, máximo líder del grupo terrorista chií libanés Hizbulá, falleció este sábado durante un bombardeo israelí en los suburbios del sur de Beirut, conocidos como el Dahye. Nasrala, quien lideró Hizbulá durante más de tres décadas, ha sido señalado como uno de los responsables del ataque contra el vuelo 901 de Alas Chiricanas, perpetrado el 19 de julio de 1994 en Panamá, que cobró la vida de 21 personas.
En un comunicado emitido por la Embajada de Israel en Panamá, se destacó la conexión entre Nasrala y el atentado. “El architerrorista Hasán Nasrala, que lideró la organización terrorista Hizbulá durante 32 años, tenía las manos llenas de la sangre de muchas decenas de miles de seres humanos inocentes en todo el mundo. Esto incluye el ataque terrorista contra Alas Chiricanas en 1994, que mató a 20 personas inocentes y que las pruebas demuestran que fue perpetrado por Hizbulá”, declaró la embajada.
La participación de Hizbulá en el atentado contra Alas Chiricanas había sido confirmada en 2018 por el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, durante una visita oficial del entonces presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, a Israel.
Nasrala, quien se convirtió en Secretario General de Hizbulá en 1992, promovió abiertamente una agenda destinada a la destrucción del Estado de Israel. Bajo su liderazgo, el grupo terrorista fue responsable de varios atentados, incluyendo el ataque con coche bomba contra la Embajada de Israel en Argentina en 1992, que dejó 29 muertos, y el atentado en 1994 contra el edificio de la comunidad judía en Buenos Aires (AMIA), que resultó en la muerte de 80 personas.
En su primera declaración pública tras la muerte de Nasrala, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, señaló que, si bien se trató de un logro significativo, la tarea aún no está terminada. “Hemos conseguido grandes logros, pero el trabajo aún no está completo. En los próximos días afrontaremos desafíos importantes y los afrontaremos juntos”, declaró Netanyahu.