El arzobispo de San Salvador pidió perdón públicamente el domingo por el presunto abuso que un cura habría cometido contra un menor de edad.
“Hemos perdido perdón a la víctima y ahora lo reitero públicamente, y pedimos perdón también a la comunidad por el escándalo que este hecho ha causado, a la vez oramos por la víctima y también por el sacerdote”, dijo el arzobispo capitalino, José Luis Escobar Alas, en conferencia de prensa luego de presidir la misa dominical en la catedral metropolitana en el centro histórico de San Salvador.
La víctima, que no fue identificada, fue recibida por la Comisión Arquidiocesana de Protección de la Niñez, que según dijo Escobar Alas, “encontró mérito en su acusación y sugirió se inicie el debido proceso canónico”.
El sacerdote acusado, identificado como Leopoldo Sosa Tolentino, fue suspendido en sus funciones y se nombró un nuevo párroco, explicó.
Escobar Alas dijo que el presento abuso sexual sucedió hace 25 años, “ya está prescrito a nivel jurídico y penal en el país. Los hechos ya están prescritos, pero no para la Iglesia"
En 2016, la Iglesia católica destituyó a tres sacerdotes salvadoreños tras ser encontrados culpables de abuso sexual de menores.
En julio de 2019, destituyó al sacerdote José Adonay Chicas Campos tras un proceso canónico en el que se le declaró culpable de abusar sexualmente de un menor. Un tribunal salvadoreño condenó a 16 años de prisión al sacerdote y le ordenó pagar 1.200 dólares en concepto de responsabilidad civil.
Los escándalos de abusos contra menores salieron a luz en noviembre de 2015 cuando el arzobispo de San Salvador cesó a un sacerdote que fue acusado de haber violado a una mujer, cuando tenía entre nueve y 17 años.