Estados Unidos agradeció este viernes a las autoridades españolas haber desarticulado el jueves un artefacto explosivo enviado a la Embajada estadounidense en Madrid junto con otros sobres con pólvora y metralla interceptados en varios lugares del país.
“Gestionaron la situación de manera correcta. Estamos muy agradecidos con las fuerzas de seguridad españolas que estuvieron en el lugar y ayudaron a anular el peligro”, dijo en una llamada con periodistas el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
El portavoz evitó relacionar los explosivos con la guerra de Ucrania y solo detalló que las autoridades españolas están liderando la investigación con el apoyo del FBI y de los servicios de seguridad de la diplomacia estadounidense.
“No tengo más información para ofrecer sobre los responsables y sobre su relación con los otros paquetes sospechosos encontrados en España”, dijo.
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En otra llamada con periodistas, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, explicó que la Embajada de EE.UU. en Madrid permanece abierta para atender a los ciudadanos estadounidenses, a la vez que está “evaluando la situación de seguridad”.
Price indicó que las autoridades de Estados Unidos se están “coordinando estrechamente” con las fuerzas de seguridad españolas para investigar lo sucedido.
El jueves trascendió que el pasado 24 de noviembre se detectó un sobre con material explosivo casero dirigido al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y desde entonces se tiene constancia de al menos otros cinco, recibidos desde el miércoles en las embajadas de Ucrania y de Estados Unidos en Madrid, el Ministerio de Defensa, una base militar y una fábrica de armamento.
Un empleado de la legación ucraniana resultó herido leve al estallar el explosivo que contenía el envío, que las autoridades españolas relacionan con la guerra rusa en Ucrania.
Según las primeras averiguaciones, se trata de seis sobres de color marrón con material pirotécnico casero dentro y pequeños trozos de metralla; al menos cuatro tienen la misma letra manuscrita y fueron enviados desde España a los destinatarios. EFE