James Wilson Vincent Savile “Jimmy Savile” fue un disc jockey y el primer y último presentador del programa Top of the Pops, de la cadena británica BBC. En enero de 2013, más de un año después de su muerte, un informe publicado conjuntamente por la Asociación Británica de Prevención de Abusos a Niños, la (NSPCC), y la Metropolitan Police afirmó que 450 personas habían denunciado a Savile por abusos realizados entre 1955 y 2009.
“Jimmy Savile” es considerado el peor depredador sexual de la historia y tras su muerte en el año 2011 a tres días de cumplir 85 años de edad, se destaparon los terribles abusos cometidos gracias a su gran popularidad en la televisión inglesa pública.
Algunas fuentes hablaban de hasta un millar de víctimas y en el año 2014, se descubrieron 103 casos de necrofilia por parte de Jimmy Savile, así lo reseña Infobae.
La celebridad tenía acceso gratuito a la morgue del Hospital Leeds General Infirmary y a otros 28 hospitales.
El primer caso ocurrió en 1962, cuando el presentador tenía 36 años, y el último en 2009, a los 82. Las víctimas incluían pacientes, visitantes y personal sanitario, subraya el informe, en que se indica que abusó de personas de todas las edades.
Violó vestido como mascota
Una víctima reveló que, tras una emisión especial de Navidad en la BBC, el animador llevó al menor a su camerino y sin quitarse siquiera el traje de Womble, uno de los personajes infantiles más populares del Reino Unido en los años 70, lo violó.
Entre el público había un niño de 10 años y una niña de 12. La menor había viajado desde Escocia tras convencer a su tía de que la acompañara hasta los estudios para conocer a su ídolo. Ella y el niño se acercaron a saludar a Savile al término del programa.
Sin quitarse el disfraz que había utilizado durante el espectáculo, el animador llevó a los menores a su camarín, donde mantuvo una charla de 15 minutos. En un momento dado violó al niño, antes de agredir sexualmente a la niña, la misma mujer que ahora ha contado los hechos a la prensa, así lo reseña El Mundo.
Luego Savile pasó un brazo por detrás de cada uno de ellos y les dijo que lo que había sucedido era “un secreto”.
La víctima contó que se recuerda de pie en la estación de metro, diciendo a su tía que habían visto Savile y habían comido galletas. Pero no contó nada de lo sucedido porque pensó que era su culpa y que podría “ir al infierno”, así lo reseña El País.
Savile estuvo bastantes veces en el radar policial, pero siempre salió indemne.
Abusando de una adolescente en vivo y directo
La figura de Savile siempre estuvo acompañada de las sospechas, aunque nunca llegaron a probarse. Varios medios, ya en los años setenta del siglo pasado, se disponían a publicar reportajes sobre sus supuestos abusos a menores, pero que nunca llegaron a hacerlo porque no tenían pruebas y se trataba de un hombre extraordinariamente popular.