A partir de este martes 18 de febrero, los estudiantes del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD) no podrán utilizar teléfonos celulares ni dispositivos inteligentes durante el horario escolar. Esta medida, aprobada en junio de 2024 por la Junta de Educación con una votación de 5-2, tiene como objetivo reducir distracciones y fomentar una mayor atención en las aulas.
El superintendente Alberto Carvalho destacó que la decisión se basa en investigaciones que vinculan el uso excesivo de teléfonos con ansiedad y adicción en los jóvenes, afirmando que es necesario “devolver a los niños su infancia” y combatir la adicción a las redes sociales.
La política se alinea con la Ley de Escuelas Libres de Teléfonos de California, que permite a los distritos escolares implementar restricciones sobre el uso de dispositivos electrónicos. Cada escuela del LAUSD podrá elegir cómo hacer cumplir esta prohibición, con opciones que van desde sistemas de honor hasta el uso de bolsas magnéticas que sellan los dispositivos durante el día. Sin embargo, se permitirán excepciones para situaciones de emergencia y necesidades específicas, como condiciones médicas o permisos otorgados por maestros.