El reactor “Tokamak Superconductor Avanzado Experimental” (EAST), conocido como el “sol artificial” de China, ha marcado un hito al mantener un plasma estable a 100 millones de °C durante 1.066 segundos. Este récord mundial no solo representa un avance técnico, sino también un paso crucial hacia la generación de energía limpia a través de la fusión nuclear.
La fusión nuclear, que imita el proceso natural que ocurre en el Sol, tiene el potencial de revolucionar la generación de energía al eliminar residuos radiactivos de larga duración y reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero. A diferencia de la fisión, la fusión combina núcleos atómicos en lugar de dividirlos, lo que la hace más segura y sostenible.
China's "artificial sun" maintained a steady-state high-confinement plasma operation for a remarkable 1,066 seconds on Monday, setting a new world record and marking a breakthrough in the quest for fusion power generation. #China #artificialsun pic.twitter.com/KxaJ3hPuzc
— China Xinhua News (@XHNews) January 21, 2025
El éxito de EAST radica en mejoras clave, como un sistema de calefacción que ahora tiene el doble de potencia de salida, equivalente a casi 140.000 hornos microondas domésticos. Este avance ha permitido que el reactor alcance condiciones críticas necesarias para la autosuficiencia del plasma, un requisito fundamental para el funcionamiento continuo de futuras plantas de energía de fusión.
El proyecto EAST colabora con iniciativas internacionales como el Reactor Termonuclear Experimental Internacional (ITER) en Francia, que se espera entre en funcionamiento en 2035.
Mientras tanto, otros países como Estados Unidos y Corea del Sur también desarrollan sus propios reactores de fusión, compitiendo en la carrera por la energía limpia.
Aunque aún queda mucho por hacer para que la energía de fusión sea viable comercialmente, el récord alcanzado por el EAST demuestra que estamos más cerca de una fuente de energía ilimitada y sostenible, esencial para enfrentar los desafíos del cambio climático y la creciente demanda energética global.