En febrero de 2025, la extensión del hielo marino a nivel mundial alcanzó un mínimo histórico, según informó el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S). Este fenómeno es una señal alarmante del calentamiento global y sus efectos en las regiones polares.
El 7 de febrero, la superficie combinada de hielo en el Ártico y la Antártida se redujo a 16,04 millones de kilómetros cuadrados, la cifra más baja registrada hasta la fecha. En el Ártico, la extensión del hielo fue un 8% inferior al promedio de febrero, mientras que en la Antártida la disminución fue aún más pronunciada, con un 26% por debajo de la media.
La cobertura de hielo marino global se encuentra en mínimos históricos
— DW Español (@dw_espanol) March 6, 2025
El observatorio climático europeo Copernicus indicó que durante ese mes se registraron temperaturas hasta 11º C por encima del promedio cerca del Polo Norte.
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Este retroceso del hielo marino tiene consecuencias significativas para el clima global. La pérdida de superficies heladas reduce la capacidad del planeta para reflejar la radiación solar, lo que provoca una mayor absorción de calor por los océanos y acelera el calentamiento global.
En redes sociales, científicos y ambientalistas expresaron su preocupación por estos datos, destacando la urgencia de implementar medidas efectivas para mitigar el cambio climático. La comunidad internacional enfrenta el desafío de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y proteger los ecosistemas polares para preservar el equilibrio climático del planeta.