Rosángela da Silva estaba junto al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva cuando salió de la cárcel en Curitiba (sur), con su cabeza recostada sobre el hombro del exmandatario mientras miles de sus partidarios lo apoyaban.
Lula, un viudo de 74 años, mencionó en varias ocasiones estos últimos meses desde su celda de Curitiba su relación sentimental con "Janja", el apodo de la mujer, y su deseo de casarse rápidamente con ella una vez libre.
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Cuando citó su nombre para mostrarle su agradecimiento en su discurso ante la multitud, el expresidente fue interrumpido a gritos de “¡un beso, un beso!”, una petición que ambos ejecutaron con cariño.

El jueves por la noche, después de que el Supremo Tribunal Federal (STF) abriera la puerta de su liberación con su decisión de prohibir la prisión tras las condenas en segunda instancia, ella escribió en Twitter: "¡Mañana te voy a buscar! ¡Espérame!".
El romance
Rosángela da Silva, una mujer da cabellos castaños y expresión sonriente, que según la prensa tiene 52 años, visitó en varias ocasiones a Lula en la cárcel Curitiba, donde estuvo detenido desde abril de 2018 hasta este viernes.
La mujer vive en esa misma ciudad, aunque es oriunda de Sao Paulo. Según la prensa brasileña, trabaja en una gran empresa de electricidad y habría conocido a Lula en 1993, cuando el líder del Partido de los Trabajadores (PT) recorría el país en sus “caravanas de la ciudadanía”.
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Pero el romance "habría empezado en diciembre de 2017", según la revista Istoé, durante un partido de fútbol en el que participaba el compositor y cantante Chico Buarque. La relación se mantuvo en secreto, hasta que fue revelada hace unos meses por un visitante de Lula.
Por sus mensajes en la cuenta Twitter @JanjaLula, la pasión está a flor de piel. "Hoy solo querría abrazarte para llenarte de cariños sin fin. Felicidades mi amor, te amo para siempre", le escribió para felicitarlo por su cumpleaños, el 27 de octubre.
La revista Época reveló que Lula se quejó de no tener derecho a visitas íntimas, pero Janja fue autorizada a visitarlo una vez por semana durante una hora.
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Lula enviudó en 2017. Su esposa, Marisa Leticia Rocco, con la que Lula tuvo tres hijos, falleció a raíz de un derrame cerebral. En mayo del 2019, Lula confirmó que no estaba solo y anunció que tenía una relación con Janja.