La influencer y tiktoker transexual Ratu Thalisa ha sido condenada a dos años y diez meses de prisión por el Tribunal de Medan, en la isla de Sumatra, tras ser hallada culpable de difundir discursos de odio contra el cristianismo y perturbar el orden público a través de una transmisión en vivo en redes sociales.
Durante el directo, Thalisa mostró una estampa de Jesucristo mientras bromeaba sobre su necesidad de un corte de pelo, lo que fue considerado por las autoridades como un acto que podría “alterar la armonía religiosa” del país, donde coexisten diversas confesiones bajo una legislación estricta sobre el respeto interreligioso.
Además de la condena de prisión, la justicia impuso a Thalisa una multa de 5 mil 600 euros por el mismo delito. El caso ha desatado debate dentro y fuera del país sobre los límites de la libertad de expresión, el papel de las redes sociales y el tratamiento legal hacia las minorías sexuales en contextos conservadores.
Indonesia, que reconoce oficialmente seis religiones y castiga severamente las expresiones consideradas ofensivas hacia cualquiera de ellas, ha aumentado en los últimos años el número de procesos judiciales relacionados con contenidos digitales que involucran temas de religión.
Hasta el momento, ni los abogados de Ratu Thalisa ni organizaciones defensoras de los derechos humanos han emitido declaraciones oficiales sobre una posible apelación al fallo.