El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha lanzado una propuesta de reforma constitucional que busca transformar la estructura política, económica y territorial del país. La medida, presentada ante la Asamblea Nacional, incluye la creación de nuevas divisiones territoriales denominadas “comunas” y la incorporación de poderes comunales y populares al sistema de gobierno.
Según Maduro, estos cambios son necesarios para “construir una nueva economía diversificada” y adaptar la Constitución de 1999 a una nueva era de modernidad. La reforma también pretende reducir la dependencia de los estados y municipios tradicionales, un cambio que algunos críticos consideran un intento de centralizar aún más el poder en manos del gobierno nacional.
Si la propuesta es aprobada por dos tercios de los legisladores, se abrirá un proceso de consulta pública de 30 días antes de un posible referéndum. En 2007, Hugo Chávez intentó modificar la Constitución, pero su propuesta fue rechazada en las urnas.
Entre los cuatro puntos clave de la reforma destacan:
🔹 El poder comunal como sexto pilar del Estado
Actualmente, el sistema venezolano se basa en cinco poderes: Ejecutivo, Legislativo, Judicial, Electoral y Ciudadano. Maduro propone agregar el “poder comunal”, otorgando mayor protagonismo a las organizaciones locales y colectivos afines al chavismo.
🔹 Nueva sociedad y sanciones draconianas
Maduro insiste en que la nueva Constitución debe penalizar con dureza cualquier expresión fascista o nazista. No se dieron detalles sobre cómo se definirían estos términos, lo que ha generado preocupación entre analistas y opositores.
🔹 Regulación digital y salud colectiva
El presidente mencionó que la reforma incluiría 10 artículos relacionados con la tecnología, inteligencia artificial y redes sociales, enfocándose en el impacto de estas herramientas en la sociedad. Aunque no dio detalles específicos, esto sugiere un mayor control sobre la comunicación digital.
🔹 Economía autosostenible y actualización judicial
Maduro asegura que la reforma busca establecer un modelo económico “autosuficiente y diversificado”, aunque no explicó cómo se implementaría. También se incluirían ajustes en el marco jurídico del país.
Esta iniciativa ha generado un fuerte debate
Maduro ha dado un plazo de 90 días para que la comisión encargada de la reforma elabore un documento final. Esta comisión está liderada por altos funcionarios chavistas, entre ellos la vicepresidenta Delcy Rodríguez, el fiscal general Tarek William Saab y el ministro de Defensa, Vladimir Padrino.
Mientras el gobierno la presenta como un paso hacia la modernización, la oposición la califica como una maniobra para consolidar el poder del chavismo.