En una impactante entrevista en vivo con la abogada Giovanni Ortega “La Wyznick”, Vanessa, la última pareja de Japanese y madre de una de sus hijas, rompió el silencio para aclarar la polémica situación del reconocido artista urbano.
Vanessa aclaró la situación luego de los ataques recibidos en contra de su hija Nay de 17 años.
Según Vanessa, el artista, quien sufre de diabetes y ha enfrentado varios derrames, estaba alquilado en una casa en Praderas de San Lorenzo, esperando por cuidados que aún no habían llegado.
Luis Casis fue quien descubrió a Japanese en estas condiciones, creyendo inicialmente que había sido abandonado.
Vanessa explicó que ella misma estaba organizando la mudanza gradual de Japanese a esta casa, pero que debido a complicaciones familiares recientes con un fallecimiento de un cuñado, el proceso se vio interrumpido.
Vanessa también reveló detalles sobre la relación tumultuosa que tuvo con Japanese, incluyendo infidelidades y malos tratos. Reveló que Japanese la abandonó junto a su hina y que él ha tenido más de siete hijos a quienes hasta ha llegado a negar.
A pesar de la separación que ocurrió hace un año, Vanessa ha estado brindando apoyo continuo al artista, especialmente durante sus momentos más difíciles de salud.
Ella contó que él a pesar de su situación la abandonó a ella y a su hija.
Vanessa explicó que Japanese, quien puede mover sus manos, dejó que algunos alimentos se descompusieran y le salieran gusanos.
Luego de que Japanese enfermara, mucha gente se volcó a ayudarle y con la ayuda de ella, él tuvo una gran mejoría; sin embargo, eventualmente no seguía las indicaciones y hacía lo que quería.
El cantante urbano recibió unos 7 mil dólares de parte de Luchito Willians con su programa Da Flow y un señor apodado Colón Town le ayudó con dinero para pagar mensualidades de una casa, hacer supermercado y comprar alimentos; además, le compró una silla eléctrica, televisión, sillones, entre otras cosas, pero Japanese vendió muchas de estas cosas y utilizó alguna parte del dinero para lo previsto y otra para comprar, por ejemplo, ropa de marca y excentricidades.
Vanessa reiteró que, debido a estas malas actitudes de Japa, prefiere que la gente en vez de mandarle dinero le compre cosas que él necesite.
Además, contó que Japanese llegó a dejar de tomar sus medicamentos y en lugar estuvo tomando viagra, algo que pudo causarle la muerte.
El reportaje de Luis Casis generó un revuelo significativo en redes sociales, resultando en el desalojo de Japanese de la casa donde estaba alquilado. La dueña de la propiedad no autorizó la grabación ni la exposición pública de la situación.
Tras esto, junto a Vanessa, Casis ofreció ayudar con un lugar para que Japanese se quedara, pero a ella no le agradó y le prohibió a Casis seguir grabando y exponiendo al artista.
Tras estos eventos, Sech y su padre, un pastor de iglesia se involucraron y ofrecieron pagar un geriátrico para Japanese, asegurando que recibirá la atención adecuada.
Vanessa aceptó esta oferta, destacando que ahora las regalías de Japanese están en orden y pueden utilizarse para proporcionarle lo que necesite.
A pesar de los desafíos y las dificultades, Vanessa sigue comprometida a apoyar a Japanese en su proceso de recuperación, esperando que esta vez pueda lograr una mejora significativa en su situación.