Tom Cruise sigue siendo un ejemplo de las estrellas de Hollywood que ruedan sus propias escenas de acción, incluso a los 62 años.
Durante el rodaje de ‘Misión Imposible: Sentencia Final’, Cruise se jugó la vida colgándose de un avión a miles de metros de altura y a 200 kilómetros por hora.
El director de la película, Steve McQuarrie, declaró que “hay acrobacias en esta película que les van a derretir el cerebro”.
Cruise admitió que tuvo que aprender a respirar porque no recibía oxígeno cuando sacaba la cara a esa altura y a esa velocidad.
“Cuando sacas la cara a esa altura y vas a más de 200 kilómetros por hora, no recibes oxígeno. Tuve que aprender a respirar. Hubo momentos en los que me desmayaba físicamente y no podía volver a la cabina”, comentó a la revista Empire.
No es la primera vez que Cruise se pone en peligro durante esta película. Hace poco estuvo a punto de morir bajo el agua, y el rodaje se pospuso durante meses debido a un accidente con un submarino.
Cruise está tan comprometido con la cinta que, según dicen, “hasta diseña los cubos de palomitas”.