Benjamin Eisenman, ilusionista y mentalista profesional de 27 años, ha dedicado más de una década a perfeccionar su arte. Comenzó su camino en la magia a la temprana edad de 16 años, motivado por la fascinación que siente al poder brindar momentos de asombro y alegría a las personas. Según Benjamin, la magia es el arte más hermoso que existe, ya que permite a la gente escapar de la rutina diaria y vivir experiencias aparentemente imposibles.
El camino de Benjamin en la magia ha sido extenso y lleno de aprendizajes. Aunque bromea sobre haber estudiado en Hogwarts, la famosa escuela de magia de Harry Potter, su formación ha sido más bien el resultado de años de práctica constante y dedicación.
La magia, explica, es un arte en el que nunca se deja de aprender. Cada truco, cada presentación, es una oportunidad para mejorar y crecer como ilusionista.
Uno de los retos más grandes que ha enfrentado en su carrera ha sido el alto costo de ser un mago profesional. Desde la compra continua de mazos de cartas hasta la inversión en materiales específicos para ciertos trucos, ser mago requiere una inversión económica significativa.
Sin embargo, Benjamin asegura que, con una estrategia adecuada de marketing y una presencia bien establecida, es posible no solo cubrir estos gastos, sino también convertir la magia en una carrera lucrativa.
Además de su dedicación a la magia, Benjamin también maneja otros negocios, pero la magia sigue siendo su principal fuente de ingresos. Su pasión por este arte lo ha llevado a viajar por el mundo, realizando espectáculos en países como España, Estados Unidos y Colombia.
También ha llevado su talento a las redes sociales, donde ha conseguido más de 34 mil seguidores en Instagram. Sin embargo, Benjamín señala que trasladar la magia del escenario a las redes sociales presenta sus propios desafíos, ya que no todos los trucos son adecuados para ambos formatos.
Uno de los momentos más destacados de su carrera fue su participación en la Copa América, donde tuvo la oportunidad de hacer magia para los jugadores de la selección panameña de fútbol. Entre ellos se encontraban figuras como Fulo Martínez, Freddy Góndola y Carlos Harvey. Los videos de estos encuentros están disponibles en sus redes sociales, donde los seguidores pueden ver la reacción de los jugadores a sus sorprendentes trucos.
En cuanto a sus trucos favoritos, Benjamin tiene dos que destacan. Uno de ellos es un truco realizado por David Blaine, uno de sus magos favoritos, en el que Blaine traga ranas vivas y luego las vomita, un acto que desafía los límites del cuerpo humano.
Aunque Benjamin admira este truco, admite que no se atrevería a intentarlo debido al riesgo que implica. Por otro lado, su propio truco favorito es uno que ha perfeccionado con el tiempo, donde dos cartas firmadas por él y un espectador se intercambian de manera inexplicable entre sus bocas.
En el mundo de la magia, existe una tradición de no revelar los secretos detrás de los trucos, y Benjamin es fiel a esta tradición. Explica que aprender magia requiere dedicación y esfuerzo, y que aquellos que están realmente interesados en el arte deben estar dispuestos a investigar y practicar por sí mismos.
Finalmente, Benjamin compartió un truco en vivo, donde demostró su habilidad para combinar tecnología y magia. A través de una serie de pasos cuidadosamente orquestados, logró que un papelito que había estado en la mano de su interlocutor revelara el nombre de una celebridad seleccionada al azar, utilizando fuego para que el rostro de ‘Will Smith’ apareciera mágicamente en el papel.
Benjamin continúa sorprendiendo y deleitando a su audiencia, ya sea en shows en vivo, en las redes sociales o a través de presentaciones privadas. Su capacidad para crear momentos mágicos sigue siendo el motor que impulsa su carrera, y no cabe duda de que seguirá dejando una huella en el mundo de la magia.