Michael Phelps, el deportista más laureado de la historia en los Juegos Olímpicos, se había mantenido lejos de los medios de comunicación en los tiempos más recientes, sin embargo, el ex nadador ha aparecido y para tocar algunos temas muy sensibles, de cara a la proximidad cada día que pasa con la nueva cita olímpica.
En declaraciones concedidas a CNN Sports, el estadounidense valoró la futura limpieza que pueden tener los deportistas en la capital nipona en un tono para nada optimista.
“Puedo decir honestamente que durante toda mi carrera, no sé si alguna vez competí en un carrera con los rivales limpios. Si ese es el caso, entonces sí, no creo que nada haya cambiado. Creo que hay muchos problemas y el hecho de que no estemos en el mismo campo de juego es realmente perturbador”, argumentó Phelps, cuyas palabras desprenden un panorama realmente preocupante sobre la credibilidad de los próximos Juegos en cuanto al posible dopaje al que se someten los deportistas.
Según contó Phelps, él fue uno de los atletas más controlados de su generación, pero considera que ese seguimiento no se aplica a la gran mayoría y que eso favorece que existan menos garantías de limpieza en los grandes eventos deportivos: “Si todos nos hacemos las pruebas de esa manera, genial, pero sé que no. Hasta que suceda, hasta que todos estemos al mismo nivel, nada va a cambiar”.
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Los negativos pensamientos de Phelps van más allá de la integridad de los deportistas, ya que incluso duda que la pandemia permita celebrar los Juegos. “El hecho de que vayan a poner más de diez mil atletas, más todos los voluntarios, más todos los entrenadores, no tiene sentido para mí. Simplemente no veo cómo puede suceder. Pero cruzo los dedos para que con las vacunas todo va bien en ese frente. Pero, quiero decir, no sé, hay demasiadas cosas desconocidas”, concluyó el ‘Tiburón de Baltimore’.