El lateral derecho del Club Atlético Independiente (CAI), Marlon Ávila, expresó su preocupación sobre el estado de los campos de juego en Panamá en una reciente entrevista con FIFPro, tras sufrir una grave lesión en el estadio de Los Andes.
El futbolista, que se recuperó de la rotura del ligamento cruzado anterior, señaló que la falta de mantenimiento de las canchas representa un riesgo para los jugadores profesionales.
Ávila, que detalló cómo ocurrió su lesión en un amistoso de pretemporada, comentó que “cada partido es una moneda al aire”.
“Me vino un balón largo. Yo controlé y, cuando me dispuse a atacar el balón, se me trabó el talón. Sentí que la rótula se movió para un lado y volvió”.
Esta situación ha generado temor entre los jugadores, quienes consideran que jugar en algunas canchas es un riesgo constante.
“Cuando volvió a tocarme jugar en el mismo campo, estaba con bastante temor”, confesó.
El futbolista también criticó la falta de acción del Estado, comparando la inversión en estadios de béisbol con la situación de los recintos futbolísticos.
“Si uno ve el estadio de béisbol en La Chorrera y luego el estadio de fútbol, se va a echar a llorar”, lamentó en relación al estado del Justino Salinas y el Muquita Sánchez.
La entrega en el sitio web de La Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales, que representa a 65 mil futbolistas a nivel mundial, resaltó que tres estadios panameños requieren de atención urgente.
En Los Andes existen hasta 40 desniveles sobre el césped que fue inaugurado hace poco más de tres años; el Cascarita Tapia y el Muquita Sánchez también acarrean problemas en la cancha e iluminación.
El director de Pandeportes, Miguel Ordóñez, dijo semanas atrás a La Prensa que en el corto plazo se busca licitar obras para mejoras tanto en el Muquita Sánchez, Cascarita Tapia y el Maracaná, este último dejó de celebrar partidos de LPF hace más de dos años.