James Rodríguez quiere ir al Atlético. La noticia, de julio de 2019, sólo ha de borrarle la fecha y ponerle la de hoy. Así fue entonces, así sigue siendo ahora. El Universal de Colombia amanecía con la noticia de que ese interés no sólo sigue muy vivo sino que, durante estos meses de confinamiento, se ha reactivado.
“James Rodríguez se quedaría en Madrid y jugaría con el Atlético”, titulaba la información en la que detallaba las intenciones de todas las partes, sobre todo las del futbolista y las del club que le busca, el Atlético del Cholo. Porque hoy, como entonces, James sigue en la boca del Cholo.
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Le pidió con insistencia la temporada pasada y sólo un resultado de fútbol lo alejó: el 7-3 del Atlético al Madrid en el amistoso jugado en New Jersey durante el verano pasado que trajo consigo el “no” a la operación de Florentino Pérez cuando estaba cerca de cerrarse.
Pero, diez meses después, todo sigue más o menos igual. Simeone quiere a James, James no juega en el Real Madrid y el Real Madrid podría ingresar 25 millones por un futbolista por el que en su día, 2014, pagó 80. Cierto es que, habiéndose acogido a un ERTE durante la crisis del coronavirus, tal y como adelantó AS ayer, el Gobierno fiscalizará y vigilará los fichajes que intente el club rojiblanco, pero, acostumbrado al encaje de bolillos y con varios futbolistas en el mercado (léase Lemar, léase Arias) intentaría su fichaje.
El Universal daba cifras: “Su representante Jorge Mendes asegura que James no se irá de Madrid, ya que Atlético le hizo una oferta por 25 millones de euros, para tenerlo en su filas”.
“Otra estrategia sería que el 10 colombiano aguante la suplencia un año más para de esta forma salir libre en 2021, cuando finiquita su contrato”, detallaba también. Para Zidane no cuenta. No contaba el verano pasado y ni cuenta éste, a pesar de que entre medias estuvo ese 7-3 y la promesa de Zidane de darle más minutos, más presencia en la plantilla.
No ha sido así. Sólo ha disputado un 14% de los minutos en Liga, migajas, 341′. En total tampoco han sido muchos más: 650′ con un gol y dos asistencias. Simeone le quiere y él se deja querer. Este verano seguirá el culebrón. Ambos quieren un final diferente al del año pasado.