Un escandaloso caso de fraude ha sacudido a la NBA, involucrando a dos ex estrellas de la liga: Dwight Howard y Chandler Parsons. El empresario de Georgia, Calvin Darden Jr., fue declarado culpable este viernes por un jurado en Nueva York de estafar a Howard por 7 millones de dólares bajo falsas promesas de inversión. El engaño consistía en una supuesta compra del equipo Atlanta Dream de la WNBA, una transacción que nunca existió.
Howard, reconocido como uno de los pívots más dominantes en la historia de la NBA, cayó en la trampa de Darden al creer que estaba invirtiendo en el equipo de la WNBA. Durante el juicio, Howard testificó que entregó 7 millones de dólares convencido de que sería copropietario del Atlanta Dream. Sin embargo, la realidad era muy distinta, ya que el equipo fue adquirido en 2021 por un grupo inversor que incluía a la exjugadora de la WNBA, Renee Montgomery.
Dwight Howard shared that, while he was playing, he had plans to buy the WNBA’s Atlanta Dream, but those ambitions were halted after a business partner & former agent stole $7 Million from him.
— Courtside Buzz (@CourtsideBuzzX) September 18, 2024
“$7 million… it was a part of my agent. That one hurt. What was my mental (state)?… pic.twitter.com/jmYa9qUw56
“Me dieron una bofetada en la cara”, fue la frase con la que Howard describió su sentir al darse cuenta de la estafa. El fraude no solo afectó a Howard, sino también al ex jugador de la NBA Chandler Parsons, quien fue engañado en una maniobra separada por Darden. Parsons envió un millón de dólares creyendo que iba a ayudar en el desarrollo del actual jugador de los Golden State Warriors, James Wiseman.
Darden tiene un historial fraudulento, ya que fue sentenciado en 2016 a un año de prisión por hacerse pasar por su padre, Calvin Darden Sr., en un intento fallido de comprar la revista Maxim. A pesar de haber cooperado con los fiscales en esa ocasión, Darden reincidió en el fraude y esta vez rechazó las ofertas de un acuerdo con el gobierno, lo que lo llevó a juicio.
El empresario utilizó los millones que estafó para comprar lujos desmedidos, entre ellos dos autos de alta gama, relojes costosos y una casa valuada en 3,7 millones de dólares. El gobierno planea confiscar todos sus activos, incluidos autos de lujo, obras de arte y joyas.
Darden podría enfrentar entre 11 y 14 años de prisión cuando sea sentenciado a principios del próximo año, marcando así otro capítulo oscuro en su historia.