El Real Madrid resistió una remontada feroz del Deportivo Alavés para asegurar una victoria ajustada 3-2 en el Santiago Bernabéu, celebrando el partido número 300 de Carlo Ancelotti como técnico del equipo. Los goles tempranos de Lucas Vázquez, Kylian Mbappé y Rodrygo pusieron a los Blancos con una ventaja cómoda, pero los esfuerzos tardíos de Carlos Benavidez y Kike García encendieron la alerta en los minutos finales.
Desde el pitazo inicial, el Madrid demostró su dominio. Apenas transcurría el primer minuto cuando Vinicius Junior aprovechó un pase largo de Valverde, avanzó por la banda izquierda y asistió magistralmente a Vázquez, quien no perdonó de corta distancia.
El segundo gol llegó cerca del descanso, cuando Mbappé, en un notable despliegue de técnica, se combinó con Bellingham antes de rematar desde el borde del área. Ya en la segunda mitad, Rodrygo cerró una rápida contra con un disparo raso para el 3-0.
No obstante, el Alavés no se rindió y, aprovechando errores defensivos, Benavidez y García lograron anotar en los minutos 85 y 86, complicando los planes del Madrid. Sin embargo, los de Ancelotti recuperaron el control y evitaron lo que hubiera sido una sorpresiva remontada.