Desde su llegada a México para unirse a los Pumas de la UNAM, Adalberto Carrasquilla, mediocampista de 26 años, no se guardó nada al analizar la dolorosa derrota de Panamá 2-1 ante México en la final de la Liga de Naciones de la Concacaf.
El partido, disputado en el SoFi Stadium de California, se definió por una jugada desafortunada protagonizada por José Córdoba, defensor del Norwich City, quien cometió una mano dentro del área que acabó siendo determinante.
“Con muchas sensaciones de impotencia. Sabíamos que podíamos hacer un poco más. Fue una jugada que nos saca del partido”, declaró Carrasquilla en entrevista con Central Fox México.
Carrasquilla fue autocrítico con su selección: “Cuando subimos el nivel y empatamos, México no sabía qué hacer. Si manteníamos ese ritmo, otra historia se hubiera escrito en el segundo tiempo”.

A pesar de la amargura del resultado, Carrasquilla no dudó en respaldar a Córdoba: “Es una jugada que se le va en segundos. No fue intencional.

Él creyó que tenía una marca atrás. Hay que apoyarlo, ya la final está perdida”.
Más allá del resultado, el mediocampista ve aspectos positivos: “Probamos una nueva formación y estilo para jugar de visita. Panamá está creciendo, quiere competir con los grandes y eso se ha visto en los últimos partidos”.
Panamá demostró carácter durante el torneo, dejando en el camino a selecciones como Canadá y posicionándose como una potencia emergente en Concacaf.
La derrota en la final puede doler, pero las palabras de Carrasquilla reflejan madurez, análisis y una visión optimista sobre el futuro del fútbol panameño.