Desde muy niño, Alejandro Pecero ha estado ligado al béisbol en varias facetas. Primero fue jugador, luego anotador y ahora es uno de los árbitros de mayor renombre en nuestro país.
Pero aparte de eso, Pecero también tiene otra gran pasión y es la de ayudar al prójimo como médico general, profesión que ejerce desde hace dos años.
Tomando en cuenta que ambas labores requieren mucha entrega y dedicación, pareciera difícil poder combinarlas, pero Pecero ha podido hacerlo hasta ahora y con éxito, aunque al principio no fue fácil.
“Estando en la Universidad era un poco complicado y agotador. A veces conversaba con los profesores y decanos para que me dieran espacio (para arbitrar) y como no tenía malas calificaciones eso me ayudó”, comentó.
“Son dos profesiones parecidas, ya que algo nuevo sale cada año y hay que estar leyendo y educándose todos los días”, argumentó.
CARRERA COMO ATLETA
Como atleta, Pecero llegó a representar una docena de veces a Panamá Oeste desde la Infantil hasta la Juvenil. Su posición era la de receptor.
“Era un pelotero disciplinado, que trabajaba duro. Un catcher defensivamete confiable”, comentó el técnico Luis Muñoz, quien tuvo la oportunidad de dirigir a Pecero.
TAMBIÉN PUEDES LEER: Un recuerdo intacto. Danilo Pinnock recuerda la pretemporada junto a Kobe Bryant
Al salir de la Juvenil, Pecero quiso mantenerse cerca del deporte de sus amores y por motivación de Guillermo Castillo decidió ser árbitro, rol en el que debutó hace cinco años.
“Ya fui a los Centroamericanos y del Caribe en Colombia, a varios torneos latinos de Pequeñas Ligas y a un Mundial Sub-15 acá en Panamá”, detalló.
¿POR QUÉ MÉDICO?
A los 15 años, alguien le preguntó a Alejandro qué quería ser cuando adulto y él respondió que médico. Y así fue.
“La verdad fue algo que se me vino a la mente. El tema de la vida, de ayudar a las personas, me interesó. Es mi profesión y la amo”, argumentó.
TAMBIÉN PUEDES LEER: Keisilyn, la maestra de la Selección femenina
Pecero confiesa que ambas tareas son difíciles, aunque por supuesto el ser médico más porque es donde se definen las vidas de las personas. Señaló que su próxima meta en la medicina es especializarse, ya sea en cardiología o pediatría.
“Por supuesto, eso siempre está en la mente del médico”, reiteró el galeno, quien suele encontrar en los estadios la distracción y el escape al estrés de los hospitales.