Desde 2006 que un grupo de sacerdotes rusos arroja agua bendita desde un avión para curar al mundo del alcoholismo y la lujuria.
En este oportunidad Savva de Tver y el padre Alexander Goryachev arrojaron 70 litros de agua bendita en el Día de la Sobriedad en Rusia.
El recurso fue lanzado con un "cáliz inagotable".
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“¿Cuál es el chiste? ¿Qué estamos tratando de ayudar a las personas a deshacerse de las enfermedades? Promovemos detener el consumo de alcohol, drogas y fornicación, ¿es esto ridículo?”, explicó el sacerdote Goryachev.
“Cualquier enfermedad es de un virus y un virus es un demonio. Por lo tanto, cualquier enfermedad es principalmente una enfermedad espiritual”, explicó el sacerdote Goryachev.
El grupo de religiosos aclaró que no ve nada gracioso en las bromas que los escépticos hacen sobre esta actividad ya que, según ellos, están curando a la ciudad.
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Vyacheslav y Olga son una pareja que ha colaborado en estos eventos desde que, en una ocasión, uno de ellos fue “curado” de la embriaguez gracias a estos rituales, según indicaron a medios.
