José María Infanzón, alias ‘Meda Luna’, quien se fugó de cinco prisiones distintas y fue considerado el mayor asaltante, traficante y secuestrador del país; regresó al barrio que lo vio crecer, Cabo Verde, a pedir perdón.
Infanzón asaltaba bancos entre los años 80 y 90. En una ocasión reveló a Mi Diario que allí donde lo ven, producto de su vida delincuencial, tiene 36 marcas de balas en su cuerpo.
Ahora está convencido de que está aquí hoy, no porque fuera el más astuto o escurridizo, sino, porque Dios tuvo misericordia de él, porque “Dios es el que cambia, el que transforma”.
Y es que, ‘Media Luna’ arrepentido de su pasado, aceptó a Cristo y ahora participó de una campaña evangelística del templo Fuente de Salvación, justo en Cabo Verde.
“Yo nací aquí en Cabo Verde... Multi 2, apartamento 11B”, dijo y en medio de su prédica reconoció cómo se convirtió en “el más malo del barrio”.
“Crecí en este barrio con odio y resentimiento, porque era el más chico del grupo y constantemente los que eran más grande que yo, me irrespetaban, abusaban. Cuando mi papá me mandaba a la tienda, allá me tenían a uno y trataba de chifear por acá y me tenían a otro.. y me ponían, pelea con él, pelea con este, pelea con el otro.. y fue tanta la maldad que yo decidí ser el más malo de este barrio”.
“Y era tanto el resentimiento que había en mi corazón que comencé a enfrentarlos uno por uno. Y crecí con ese deseo de que me tuvieran temor, de que cuando me vieran caminar no se atrevieran a mirarme a la cara e hice cualquier cantidad de cosas...”, reveló.
“Pero hoy quiero decirles... Nuestra intención aquí no es contarle cuántos males hicimos, es hablar del amor de Dios para con nosotros, que no siendo nosotros merecedores de su misericordia, hoy estamos aquí gracias a la misericordia de Dios”.
“Mi intención no es venir a entretenerlos a ustedes o echarle una historieta de indios y vaqueros... es traerle la palabra de Salvación y de vida eterna”, reiteró Infanzón antes de pedir perdón.
“Antes de llevar la ofrenda a un altar, la Biblia nos enseña que si hemos ofendido a algún hermano, hemos causado algún agravio, primero nos pongamos en paz con nuestros hermanos y luego llevemos la ofrenda”, dijo.
“De corazón yo quiero pedirle a aquellas personas, de este barrio, que en un momento les causé dolor, angustia, algún mal con mis acciones, en el nombre de Jesús quiero pedirles perdón. Y ese perdón se lo pido de corazón, no de labios. Porque sé que en mi andar afecté a muchas personas y les causé daño a muchos... Pero la Biblia dice que las cosas viejas pasaron y aquí todas son hechas nuevas”, manifestó un ‘Media Luna’ redimido.