Hago trabajo social con un grupo de amigos, pero permanentemente aliento a los empacadores en los supermercados, vendedores de periódicos, vendedores de frutas, etc. Más de darles algo, les coopero con sus trabajos y se me ha quedado en mi hablar una frase: “Toma, para que empieces bien el día”.
No es un regalo, ni una limosna, es una cooperación a la gente que sale honestamente a ganarse unos reales para llevar algo a su casa. Algunos con las inclemencias del clima, como lo hice en alguna fase de mi adolescencia. Más que estigmatizar a la gente por lo que hace, debemos ver si le podemos ayudar a lograr una oportunidad digna para que mejoren sus ingresos.

Sí, sabemos en las calles hay algunos inescrupulosos que piden o se hacen pasar por necesitados. Algunos han caído en adicciones y muchas veces, no es que hayan sido abandonados por sus familias, sino que las familias no saben cómo lidiar con esa situación.
¿Nos importa le gente? Apoyo todas aquellas iniciativas, que buscan ayudar a los más necesitados. Sobre todo a aquellas que buscan aliviar el dolor de enfermos y darles algo de apoyo moral y económico a familias que sufren por esas cosas que muchas veces no entendemos y nos hacen cuestionar nuestra fe.
Nuestra gente, y todos, tenemos un ciclo de altas y bajas, como la economía, solo que para algunos los ciclos bajos han sido tan prolongados, que necesitan de nuestra ayuda.
Esa es la esencia en la cual deben estar orientados los subsidios. Utilizando los recursos de todos, para potenciar la equidad. Pero, sabemos que nuestro entorno cercano es el más visible, pero también hay conciudadanos en las áreas alejadas y no tan alejadas de los centros urbanos, que sufren la tragedia de la pobreza, el no acceso a la educación y a la salud, por las razones que sean.
Que no se nos pierda la misión de que las personas, sobre todo los niños, son la base del desarrollo humano de los pueblos. Rescatar eso, son las luchas que debemos luchar. Ya no se puede perder el tiempo en caprichos políticos, ni mucho menos en la lucha de clases ni en ideologías, que más que tratar de ayudar a la población, lo que hacen es más agrandar esa brecha entre unos y otros.
Todos tendremos nuestras razones para apoyar grupos, posiciones, proyectos, etc, pero sin olvidar los que necesitan de verdad, los que no deben vivir con un derroche de recursos al su alrededor, donde no vemos ni una pizca de remordimientos… A mí me importa la gente…espero que a ti que lees mi blog,
también.
Consideraciones del autor
Tenemos que levantar las voces de protesta, denunciar, participar, deplorar, repudiar y todos aquellos verbos que puedan manifestar nuestro total rechazo a lo que esté malo.
Agradezco a mis lectores y amigos por sus comentarios a mis escritos.
Gracias por leer mis aportes en este blog. Recuerda: El conocimiento es infinito… y gratis.