La situación actual del país, entre protestas y la subida de precios de los productos para la alimentación, quizás nos distraen de algunas cosas que estamos dejando de último en la fila.
Con la pandemia, nos ha tocado vivir con restricciones. Pero no podemos vivir con el remordimiento del rezago de las condiciones de la educación de nuestros muchachos de la primaria y secundaria.
No solo escribo de la falta de clases, también de infraestructura y tecnología. En mi opinión, si queremos dar un salto enorme en este aspecto, debemos contemplar un plan integral que incluya el transporte, la alimentación, escuelas decentes e infraestructura tecnológica de primer nivel. Planes reales y cónsonos con la actualización para el perfeccionamiento docente. Directores empoderados con presupuestos para enfrentar y resolver, los problemas menores que se den durante el año en el colegio.
En algunos casos, el pensamiento común: “Yo pago impuesto para eso”… “para qué voy a aportar más si esa plata se la roban”. Con los acontecimientos que hemos visto en la política criolla, quizás son justificados estos comentarios, pero tenemos que salir de ese círculo vicioso y enfocarnos en lo que nos interesa como nación.
En las comunidades, no solo los docentes y padres de familia deben interesarse en las mejoras a la educación. Las empresas que están en el entorno, las autoridades locales y la comunidad en general, deben unir esfuerzo para mejorar las condiciones de las escuelas cercanas. Pudiera ser un ejemplo de una mejora genuina en pro de la gente.
De la misma manera que algunos se organizan para hacer eventos fiesteros, podemos organizarnos para mejorar las condiciones, en las que muchos de nuestros hijos encuentran su centro de estudio.
Da mucha pena ver personas protestando por salones, gimnasios, laboratorios, etc., si hay tantos rascacielos y tanta riqueza en nuestro alrededor.
En estos tiempos de tanta carencia y desesperación, debemos cuidar los alardes de opulencia. Todos hemos pasados por momentos difíciles, pero siempre…siempre debemos velar por el futuro de nuestros hijos y el país. Yo lo tengo claro…¿y tú?
Consideraciones del autor
Tenemos que levantar las voces de protesta, denunciar, participar, deplorar, repudiar y todos aquellos verbos que puedan manifestar nuestro total rechazo a los que esté malo.
Agradezco a mis lectores y amigos por sus comentarios a mis escritos. Gracias por leer mis aportes en este blog. Recuerda: El conocimiento es infinito… y gratis.