Siguiendo con la celebración del mes de la Etnia negra, un amigo me mandó esta foto y me pidió que recordara sobre el sitio donde está. Yo había escrito a mis amigos unas líneas que comparto con ustedes modificado.
Estos lugares han perdido su identidad chomba (haciendo la salvedad que la expresión “chomba” la digo con orgullo de mis raíces negras), en donde solo queda la gente.
Su entorno gira alrededor de talleres y comercios. Está perdiendo su esencia.. Ya no encuentro la sazón aquella que alguna vez probé en la casa de Isolina Grinard. Los abuelos de mis amigos ya no están.
Se murió Fanso, que conocí desde que vendía comida en la Boca Town, además este sitio ya desapareció.
Otros, partieron hace mucho a su último viaje. Nunca entré al Cine Rio, pero si comí el El Samurai. Los fines de semana no logro ver a la gente en las madrugadas visitando boites, discotecas y bares como antes.
El 5 y 6 ya no se llena porque no existe. Jamás fui a Studio 22, pero disfruté de música buena en Johnny B. Caminaba del Moscote hasta La Garantía, gastando saliva con mis amigos. Fue en esas calles donde muchos de mis amigos decidieron emigrar hacia el norte. Ahora hay grandes edificaciones que están mermando el rastro de aquella herencia.
Fue en esas calles donde logré mis amistades más queridas, fue en esas calles donde empecé a levantar el imperio del intelecto rebelde que me apasiona. A los habitantes y amigos que se niegan a dejar la identidad que por derecho le corresponde, un abrazo.
Gracias por leer mis aportes en este blog. Recuerda: El conocimiento es infinito…y gratis.