Este martes recién pasado, decía un experto en el tema, “que realmente en Panamá no hemos tenido problema del agua”. No voy a rebatir eso porque no soy experto en el tema, pero sí puedo decir lo que he vivido con ese tema. Cuando niño, en la finca de mi familia en Chilibre, los primos de mi mamá amarraron una soga en un naranjo y de una lomita se lanzaban y hacían clavados a una quebrada que cruzaba parte de nuestra propiedad.
Un tiempo viví en San Joaquín, Corregimiento de Pedregal y nos teníamos que levantar en la madrugada para llenar los tanques de agua con los cuales pasábamos el día para nuestras necesidades. Tenemos que preguntarnos cuál es el afán de algunos promotores de vivienda de hacer barriadas cerca de ríos, quebrada, etc.
Me pregunto, ¿Qué vamos a hacer con la contaminación de las fuentes hídricas? ¿La minería no contamina? ¿Por qué los ríos ahora tienen menos caudal? ¿Quién me dice de las hidroeléctricas en grandes ríos? ¿O es agua o es electricidad?
Somos conscientes, que hay algunas poblaciones que nacen sin planificación y que se les resuelve como se puede. Yo no conozco cuáles son las políticas públicas y de Estado referentes al agua. Ni siquiera tenemos una contingencia creíble para la Potabilizadora de Chilibre. Entonces, ¿tenemos o no problemas con el agua? Le pregunto a la gente del Oeste ¿Ya tienen agua 24/7? Ni me hablen del agua del Canal, porque realmente ellos son un mundo aparte que muchas veces, pareciera que todavía están viviendo en la quinta frontera.
Para muestra un botón de las cosas que pareciera importan en este país. Anuncian transporte gratis para poder asistir al partido Panamá-Honduras, pareciera que eso importa más que una política de Estado para transporte gratis a todos los estudiantes del país.
Consideraciones del autor:
Tenemos que levantar las voces de protesta, denunciar, participar, deplorar, repudiar y todos aquellos verbos que puedan manifestar nuestro total rechazo a los que esté malo.
Agradezco a mis lectores y amigos por sus comentarios a mis escritos. Gracias por leer mis aportes en este blog. Recuerda: El conocimiento es infinito… y gratis.